EL 2X1 NO SIEMPRE ES MORALMENTE CORRECTO.

Para algunos la temporada de lluvias es toda una bendición, hermosos follajes llenos de flores, citas impredecibles con refrescantes chapoteos por los parques o serenas lecturas al calor de una taza de te, pero para otros termina siendo todo lo contrario a lo que algunos consideraríamos una excitante experiencia de fin de semana. En uno de esos viernes en los que parece que nada puede salir mal, una invitación a una noche de 2x1 en un antro poco experimentado y una platica trivial con el ya nada excitante administrador, la ciudad decide sorprendernos con una de esas desastrosas noches en las que el trafico, la lluvia y las largas distancias por recorrer nos hacen desear mas que nunca cancelar todos los planes y resguardarnos en la comodidad de nuestro hogar pero para fortuna de muchos lo mejor de vivir en una ciudad como esta es que puedes pasar de una noche caótica a un inmejorable hallazgo en el asiento del conductor…Una vez terminado con una hora de alaciado, los comentarios para ponernos al corriente de nuestras vidas, la presión de quien pudo ser un buen amigo y el viaje lluvioso a Manacar por fin llegamos a nuestro inevitable destino: la barra en la planta baja. Ya instalados cerca de ella y con una tarjeta dorada por estrenar decidimos entregarnos al olvido y por fin superar la existencia de los desagradables embarazos inesperados de las novias, los reclamos de los ex y de reencuentros insípidos con los antiguos pretendientes. La noche fluía cada vez mejor y en la barra parecían conocernos desde siempre y aunque todos sabemos que uno de los deportes favoritos de los barman es coquetear con los clientes para obtener mejores propinas esta vez se convirtió en un acuerdo mutuo en el que las bebidas sencillas terminaron como dobles. Ya con un poco mas de media docena de vodkas y la inmejorable compañía de una ahora mejor amiga, las miradas y los leves coqueteos a escondidas sirvieron como aliciente de una noche que prometía ser realmente agradable alado de esa encantadora sonrisa de economista y aunque un Chistiano Ronaldo se convirtió en el pretexto perfecto para hacer lo correcto, la imposibilidad y poca astucia del integrante de la porra termino por dar pie a lo que seria un golpe realmente bajo y desconsiderado que tuvo como consecuencia uno de los mejores besos a escondidas que he tenido.La inocencia en nuestra infancia es una de nuestras mejores características pero cuando crecemos nos damos cuenta que nos hemos convertido en seres incapaces de confiar en otras personas y definitivamente esa noche fui el vivo ejemplo de nuestros propios juicios. Al parecer nada esta oculto a los ojos de los demás y menos cuando se trata de una posible propiedad privada ala que no estamos dispuestos a ceder tan fácilmente, la lealtad con los amigos siempre es primero por mas perfecto que sea el aroma de alguien mas por lo que una pronta respuesta a una conciencia que se ve un poco empañada a causa del retrazo de una alarma proveniente del nada permitido nextel que por mas que trate de evitar fue mandada. Dicen que la curiosidad mato al gato y al no obtener pronta respuesta esto se convirtió en una obsesión con consecuencias nada agradables. Con una Big Mc voladora de cuatro de la mañana y la imposibilidad por encontrar al piu la tan temida respuesta se hizo presente solo que ahora era una nada cortes mujer quien demostró a toda costa su incapacidad cerebral y falta de estilo para marcar su ya delimitado territorio, las palabras fluyeron y se definieron las ya conocidas diferencias entre ellas por lo que un arreglo mutuo era imposible, con un juicio de valores y la educación como estandarte la vencedora festejo su merecida victoria camino a casa con una bolsa sin Mc Premio en el fondo y una estupenda sonrisa que culmino la tan disfrutable y moralmente incorrecta noche de 2x1. Cuando decidimos marcar nuestro territorio, nos aterra terriblemente que alguien mas decida cruzar la línea antes que nosotros o que aun oficialmente declarada lo hagan y aun cuando la situación fue bastante clara pareciese que lo moralmente correcto pasó a segundo plano y las heridas algunas superficiales y otras aun mas profundas nos llevan a tomar decisiones que por mas sensatas que parezcan ya no las haremos mas con el corazón en la mano por el temor de convertirnos en lo que tanto hemos juzgado.